Hola babymenter@s
No se vosotr@s, pero mis peques son muy
inquietos y tras 10 minutos en cualquier parte, ya se han agobiado. Así, debo
estar continuamente cambiándolos de sitio para evitar gritos y lágrimas.
Durante los primeros meses estaban limitados a hamaca, cuna, carro y brazo,
pero ahora que ya se mueven más (y pesan más) hemos tenido que innovar un poco.
La mayoría de los bebés utilizan parques, los cuales van muy bien tanto para ellos como para las mamás y los papás, pues es un recinto cerrado con paredes y suelo elásticos que minimizan los riesgos y permiten que los peques puedan permanecer un ratito jugando mientras nosotros estamos tranquilos, aunque siempre recomendaré no dejarlos solos sin vigilancia, pues ellos se las ingeniarán para encontrar el peligro incluso donde no lo haya.
La mayoría de los bebés utilizan parques, los cuales van muy bien tanto para ellos como para las mamás y los papás, pues es un recinto cerrado con paredes y suelo elásticos que minimizan los riesgos y permiten que los peques puedan permanecer un ratito jugando mientras nosotros estamos tranquilos, aunque siempre recomendaré no dejarlos solos sin vigilancia, pues ellos se las ingeniarán para encontrar el peligro incluso donde no lo haya.
En mi caso, al tratarse de gemelos, me
agencié en los inicios de una manta de juegos mas grande de lo habitual
(100x150cm) que muy pronto se les quedó pequeña. Entonces buceé por Internet
buscando un parque de los de siempre con medidas mayores, y no lo encontré. Así
que buscando y rebuscando en la red acabé descubriendo una
especie de corralito de madera, formado por barrotes similares a los de las
cunas.
Es muy versátil, ya que consta de 8
piezas de 90x70cm con las que podemos formar desde un octógono hasta un
cuadrado o rectángulo. Incluso serviría para "vallar" una zona de
nuestra casa de pared a pared.
Yo elegí la forma cuadrada, con lo que me
ha quedado un recinto enorme de 180x180cm. En el suelo hemos puesto, cortesía
de sus tíos preferidos, uno de esos puzzles de colores que amortiguan posibles
golpes, y cada vez que toca tiempo de juegos lo llenamos de juguetes. Nos hemos
comido medio salón, pero por suerte a los peques les encanta. Al ser grande y
con barrotes en las paredes, no se sienten encerrados porque ven todo lo que
pasa en el exterior, con lo que ganamos todos. En cualquier caso, también he de
decir que no soy partidaria de dejar a los bebés durante mucho tiempo un mismo
sitio, por lo que los mios pasan allí sobre 30 minutos por la mañana y otros 30
por la tarde.
LOS BEBÉS NACIDOS EN MAYO PESAN APROXIMADAMENTE 200 GRAMOS MÁS QUE LOS NACIDOS EL RESTO DEL AÑO
Escrito por Patricia
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