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sábado, 21 de diciembre de 2013

TIPOS DE LLANTO

Hola babymenter@s

Vamos a diferenciar los tipos de llanto que podemos oír en nuestros bebés, de esta manera será mas fácil que podamos interpretarlos. Hay que pensar que el llanto es el único instrumento que tienen los bebés para comunicarse, con él expresan sus necesidades o deseos. En cualquier caso, hacen falta unas semanas desde que nacen para que lleguemos a compenetrarnos con ellos como para intuir qué les ocurre.

HAMBRE: El llanto por hambre es intenso y fuerte. Suele empezar poco a poco para enseguida acabar a gritos. Además, el bebé suele tener los ojos y los puñitos cerrados. Si este es el caso, no hay que ser estricto con los horarios de las tomas, siempre que respetemos un mínimo de 2 horas entre una toma y otra para asegurarnos de que han realizado la digestión. Si realmente es este el motivo de su llanto, se calmará en cuanto empiece a comer.

SUEÑO: Empieza como un lamento porque se siente aburrido, lloriquea y busca la posición que le resulte más cómoda. Normalmente se calmará y dormirá en cuanto se le coja en brazos, para volver a llorar al llegar a la cuna ;)

DOLOR: Podremos estar seguros de que algo le duele si su llanto aparece repentinamente con un grito fuerte. Como ejemplo está el dolor de un pinchazo, en cuyo caso gritan pero acaban calmándose enseguida, cuando el dolor inicial mengua. Si se trata de dolor de tripa, como el de los cólicos, los peques además de llorar flexionan las piernecitas hacia su barriga. Cuando se trata de un dolor pasajero como el pinchazo o un arañazo, bastará con consolarlos cogiéndolos en brazos. Si tiene dolor de barriga, suele funcionar cogerlos boca abajo, para que su abdomen quede presionado con nuestra mano, con lo que sienten algo de alivio.

NERVIOS: Suelen deberse a que no consiguen dormirse, y normalmente el motivo no es el cansancio, sino la tensión que van acumulando durante el día. En este caso lloran de forma intermitente porque están inquietos e irritables. Lo más seguro es que después de unos 5 minutos acaben calmándose ellos solitos, de repente. De todas formas, hay que comprobar que no tengan frió, calor, o el pañal sucio, ya que el llanto sería parecido.


Aunque a las mamis nos cuesta aceptar el hecho de que no siempre podemos satisfacer sus necesidades, hay ocasiones en las que lo único que podremos hacer es estar ahí e intentar no perder los nervios. Los bebés detectan cualquier tensión a su alrededor y es cierto que, si estamos nerviosos, no contribuimos a calmarles. En cualquier caso, hay que tener presente que un llanto intenso y prolongado indica vitalidad, en cambio si el peque estuviera realmente mal tan solo lloriquearía.



LOS BEBES SUELEN LLORAR SIN LÁGRIMAS HASTA LAS 6 SEMANAS DESPUÉS DE NACER PORQUE AUN TIENEN CERRADOS LOS CONDUCTOS LAGRIMALES

Escrito por Patricia

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